lunes, 28 de septiembre de 2015

Inside Chanel, mini retrospectiva de una Coco despeinada.


Hace poco tuve la oportunidad de entrar a una tienda Chanel en Estados Unidos, apenas ví los maniquíes me sentí identificada, no por el hecho de que la ropa fuera bonita, sino por el notable trabajo artesanal que había en cada pieza. Esta mañana, por cosas de la vida quise asomarme a la página web de la casa Chanel.

Encontré una serie de Fashion films llamados Inside Chanel que retrataban a Coco, una mujer de ascendencia humilde,  que llegó a ser la primera costurera en entrar al mundo de la perfumería.  Una joven revolucionaria, medio despeinada que no quería verse divina, sino sentirse cómoda en un mundo de miriñaques y corsettes, en un ambiente de represión del cuerpo y “Couture”  gobernado por hombres tratando de amansar las curvas femeninas.

En uno de los cortometrajes es el famosísimo diseñador, Karl Laggerfield quien describe a Gabrielle: “En las fotos parece que tenía una belleza del diablo, con mucho cabello, la frente muy baja  y cejas muy fuertes, como un tipo de Audrey Hepburn rural. Lo que llevaba era realmente sencillo, pero eso no tiene nada de malo, es más elegante que las cursilerías y los adornos de satén inmundo, porque si una mujer no lucía un jardín en la cabeza no estaba bien visto”.

La colección de videos revela que si bien Chanel no elaboró directamente la fragancia #5  sí fue quien lo pidió a Ernest Beaux, un perfumista de zares por esos lares de 1921, el señor le mezcló la bobadita de más de 80 aromas, pero ella muy exigente desechó las 4 primeras muestras para quedarse con el aroma de su número de suerte (De ahí el nombre de la fragancia).

En Inside Chanel Se retrata una Coco que deseaba  un “perfume para mujer que oliera a mujer”. Probablemente nadie contaba con el hecho de que nosotras por naturaleza olemos a inconformidad, tal vez fue esa es la razón por la cual Marilynn  Monroe, embadurnada hasta las pestañas de Hollywood y glamour contribuyó con la inmortalización de Gabrielle Chanel, al afirmar que para dormir solo utilizaba unas pocas gotas de #5.

Los especial de los fashion films de Chanel  es que despiertan algo más que mera admiración estética, están realizados con contrastes altos, elementos recurrentes que reflejan rasgos característicos de la casa: el número 5, el león , el diamante, los colores blanco , negro, rojo y beige. La narración tiene una voz femenina, sensual, sencilla y atrayente. Todos los clips están muy bien logrados, tienen una estética impecable y desatan la curiosidad por la marca en pocos minutos. Me atrevo a decir que el equipo creativo y sobre todo el de guion y animación en estos videos se luce. Lo más importante: le dan dimensión humana y generan un aire de admiración hacia Chanel,

Después de verlos asaltan dudas, quisiera saber si chica vestida de negro y blanco , medio despeinada por dentro  e impecable por fuera estaría conforme con el manejo de Lagerfield, un hombre amansando curvas de mujeres. Me pregunto si realmente sería feliz con los precios exorbitantes que hoy se pagan por un vestido de la casa Chanel, si se sentiría cómoda viendo que  una botella de su perfume insignia no puede ser costeado por las chicas de campo. 

¿Qué pensaría Coco Chanel de nuestros dos tipos de moda? La rápida ultrabarata ó la carísima alimentada por excentricidades de unos pocos. Al fin y al cabo fue ella misma quien abogaba por la ilusión de belleza más allá de la cantidad de kilates, fue ella quien cuestionó a las casas de joyería diciendo “¿No están las cosas más bellas hechas para circular?``.

Aquí les dejo uno de los videos por si alguien quiere verlo, el que màs me gustó, aunque suene promocional estàn muy bonitos.



viernes, 25 de septiembre de 2015

Yo, él y Raquel, una película sobre cáncer que no hace llorar.


Nombre original del film: Me Earl and the dying girl
Duración: 105 minutos
Género: Drama (Casi es comedia, casi).

Por estas épocas, se  está estrenando  en varios lugares del mundo la película: Me, Earl and the dying girlQue ha sido publicitada en idioma español como: Yo, él y Raquel. 
El título en inglés indica de manera literal la temática del film: Greg, un chico de 17 años que quiere pasar desapercibido en el colegio y hace parodias de clásicos del cine con su amigo Earl, es obligado por su madre a visitar a Rachel, una compañera de clase diagnosticada con leucemia, ambos van conociéndose Poco a poco mientras construyen lo que Greg llama una amistad arruinada.

El director de la película, Alfonso Gómez Rejón, ha participado en series como American Horror Story  y Glee. Por otro lado, El productor Jeremy Dawson, es más conocido por ser parte del área de efectos visuales en  El cisne negro, Requiem por un sueño , Across the univers y life of PI. Me limito a dar los nombres de los dos actores principales: Greg es interpretado por Thomas Mann y Rachel por Olivia Cooke. 

Si me pidieran encajar esta obra cinematográfica en un término cliché, diría que tiene una estética medio hipster, bien cuidada, llena de pequeños sarcasmos en el diálogo, a ratos un poco plana y con un guiño a los melodramas sobre enfermos terminales del tipo The fault in our stars, My sisters keeper o Camino. Se rescata que el personaje principal no es la chica con cáncer sino el muchacho que la acompaña, que no hay saturación de besuqueos ni lloraderas, lo que resulta novedoso y crea una nueva dimensión en la atmósfera de tristeza.

El vestuario y la dirección poseen un estilo que apela a la estética noventera, vemos ropa y decoración un poco grunge. La dirección  de arte  tiene paletas bien cuidadas, mayoritariamente de colores cálidos. La edición tiene un peso especial en la película, hace uso de stop motion, animaciones a mano y subtítulos para dividir el tiempo. 

Pros:
  • Una atmósfera de intimidad  amistosa-amorosa que mantiene atrapado al televidente
  • La estética de una vida totalmente monótona y cliché que se quiere reflejar está bien cuidada y va cambiando a medida que el personaje principal evoluciona.
  • Es una película que le da alta relevancia a los detalles pequeños y simples de la vida.

Contras:
  • Si han visto films de este tipo, probablemente nada va a sorprenderles.
  • Tiene un ritmo lento, la mayoría del tiempo.
  • Algunos diálogos no aportan nada, (cada cineasta tiene su estilo y es respetable) 

Otro:
  •  No supe si el tipo de sarcasmo utilizado en el argumento me gustó o me aburrió. 

Veredicto 4.2 : Si tiene una persona dispuesta a verla con usted en cine hágalo, vale la pena pagar boleta. Es una historia de profundidad media-alta, toca temas complicados de manera ligera y temas ligeros de manera complicada.  Puede  Generar conversaciones interesantes, no frente al cáncer sino a la actitud con que se vive la vida.

Véala: con amigos, con novio.
No la vea: si anda entuzado o deprimido.

Trailer:



viernes, 4 de septiembre de 2015

El arte del piropo



Según la RAE, un piropo es una variedad de la piedra granate de color rojo fuego, o una lisonja, es decir : una alabanza exagerada y generalmente interesada que se hace a una persona para conseguir un favor o ganar su voluntad. En Colombia el piropo es simplemente un cumplido que se le dice a una persona, (sobre todo a una una mujer) cuando pasa por la calle.  Desde mi punto de  vista, piropear es un arte poco valorado que requiere precisión, agilidad momentánea y una expresión oral bien cuidada .

He leído varios textos contra los piropos, argumentando que son sexistas, amenazas sexuales o que hacen sentir incómodas a las mujeres. Y sí, a veces es cierto hay piropos ñeros, ¡ñeros y clichesudos, que están más usados y desteñidos que media de abuelito!.

Entre los más populares se encuentran  el dulcísimo “Si así lo mueve y así lo bate, ¿cómo será ese chocolate?”, el camionero “tanta curva y yo sin frenos”,  el interesado “Quisiera ser pirata no por el oro ni por la plata, sino por el tesoro que tienes entre pata y pata”; el kamikaze “ está que se totea de lo buena”;  el religioso “los angelitos están bajando del cielo”  y  el matrimonial “suegra vaya con Dios que yo me quedo con su hija”.

A pesar de que ninguno de esas alabanzas despierta en mí un interés mínimo por el sujeto que los declama, y a veces lanzo una  mirada asesina al piropeador, debo admitir que apenas doy la vuelta y no me ven, me trago una señora carcajada interna, no es por ser mala sino porque considero el piropo criollo una expresión del patrimonio creativo nacional.

Hace poco hablaba con una colombiana que vive en España , ella me comentó que extraña los piropos, y lo máximo que le habían dicho era "adiós guapa". Fue entonces cuando  entendí que los cumplidos callejeros son expresiones del lenguaje casi tan importantes como la copla o la poesía, por  eso a mis ojos un piropo poco original o poco delicado  viene de alguien que solo ha leído o coleccionado clichés  durante toda su vida.

Vengo a decirles que no todo piropo es ñero y que si usted  quiere dar un piropo galante, en vez  de “gala” es necesario tener algunos aspectos en cuenta.

1.       Dígalo de manera cortés,  mirando a la cara y sin hacer muecas raras
2.       Alabe la belleza,entera de la fémina en cuestión, no solo las nalgas, las piernas  o las puchecas.
3.       Asegúrese de evitar el cliché, “Me pierdo en el mar de tus ojos”, “Barbie”, “mamacita”, y “adiós princesa” ya no sirven, no todas las chicas queremos tener corona, ser mamás de bebés imaginarios o tipos calentones y perdidos chapoteándonos al lado, ¡menos que nos comparen con una muñeca  viejísima!.
4.       Sea sincero, pero no guache.
5.        Si no es bueno echando piropos, los gestos de caballerosidad clásicos siempre son bien apreciados: cargar la maleta o el bolso de la dama,  sonreír de manera natural, ceder la silla, o un “Te ves muy bonita” funcionan bastante bien.
6.       Si ve que la persona a quien va a piropear tiene cara de puño guárdese su haikú chibchombiano; muérdase la lengua de ser necesario. (Cada cosa en el momento adecuado).

A mí personalmente sí me han dicho piropos bonitos. De esos que no amenazan sino que alegran el día. “Ay mona, míreme que si no muero”, “Si despeinada se ve bonita, como será bien arregladita”, “disculpe el atrevimiento, pero tengo que decirle que es una mujer muy hermosa”. Son los 3 de los que más recuerdo y que no me dejaron poner mirada asesina. Por eso, queridos amigos sepan que para echar un buen piropo, uno No necesita exagerar, las mujeres sabemos lo que tenemos y lo que no.



La verdad, es que inclusive las mujeres que hacemos cara de sapo reventado podemos apreciar la sinceridad masculina y más de una vez nos hemos tragado las ganas de gritar “¡papacito, rico delicioso, pedacito de arroz con pollo!”  Pero en vez de eso simplemente sonreímos con cara de idiotas. Nosotras también somos humanas y  no son pocas las ocasiones en que hemos estado a punto de soltar la baba por alguien. Así que si le gusta una chica piropéela, pero con cariñito y creatividad.

Si usted es mujer,  deje de reprimirse e inténtelo, quien quita que el muchacho en cuestión un día se acuerde y se ría. Pero hágalo de manera consiente. Recuerde: piropear, es todo un arte.